Receta: Tomate valenciano con olivada de aceituna manzanilla
El tomate valenciano (si, ese que sabe a tomate como los de antes) acaba de iniciar su temporada…así que, que mejor forma de celebrarlo que preparando esta olivada. Con verduras y hortalizas (y sin gluten y -casi- sin calorías) este plato de la gastronomía mediterránea es ligero y divertido. ¡Triunfarás!
-Ingredientes
Una lata de aceitunas manzanilla (sin hueso)
Dos ramas de tomillo fresco
Una cucharada de orégano seco
Una rama de romero fresco
1 diente de ajo
Una cucharada de alcaparras
4 Tomates valencianos
Dos pepinos
1 hinojo
3 rabanitos
Una cebolla y media tierna
Una rebanada de pan
Brotes de ensalada o canónigos
50 gramos de albahaca
Aceite de oliva virgen extra
Sal, pimienta y vinagre de Jerez
Pétalos de flores comestibles
-Modo de elaboración
Lo primero de todo será preparar la olivada de aceitunas manzanilla. Hecho esto, habrá que coger un recipiente para macerar las aceitunas. Para ello, tendremos que rociar con un chorrito de aceite de oliva y añadir ajo, cebolla, romero, tomillo, orégano y alcaparras. Después de dejar reposar todo un día, conseguiremos un mejor sabor… ¿Ya ha pasado un día? Vale, entonces habrá que verter la mezcla en una picadora y añadir un poco más de aceite. A continuación, trituraremos y obtendremos una especie de paté de aceitunas. Lo reservamos.
Toca escaldar los tomates. Los lavamos y hacemos, sobre la piel de cada uno, un corte en forma de cruz en la parte inferior. Debe de ser un corte superficial, es suficiente con cortar la piel. En una olla con agua hirviendo ponemos los tomates hasta que vemos que empiezan a soltar la piel. Después, los retiramos y ponemos en un recipiente con agua fría. Dejamos enfriar unos minutos y les retiramos la piel. Con la ayuda de un cuchillo le quitamos, a los tomates, el interior y reservamos toda la pulpa para el salmorejo. Los tomates deben quedar con una bonita forma para que luego, al rellenarlos, queden con un aspecto atractivo.
Siguiente paso. Habrá que coger un pedazo de pan -si puede ser, del día anterior- y ponerlo en un cuenco con agua, al que añadimos sal. Dejamos unos minutos en remojo y aprovechamos para preparar un tartar de verduras. Para ello, pelaremos la cebolla que nos queda y el pepino, cortando todo en trocitos y haciendo lo mismo con el hinojo y los rábanos. Siguiente paso: verter todo en un cuenco y añadir aceite, vinagre de Jerez, sal y pimienta.
Ya casi hemos acabado. Hay que emplatar. Para esto, cogemos un plato y rellenamos el tomate con el tartar de verduras que ya tenemos preparado. Luego, hay que colocar la olivada en la base del plato en el que vamos a servir. Ahora, ponemos el tomate boca abajo y lo rociamos con el salmorejo. Último toque: poner una cucharadita de olivada sobre el salmorejo. De este modo, podremos pegar, sobre ella, los brotes de lechuga en forma de bouquet. Por último, decoramos con los pétalos de flor y las tiras de los rabanitos. Naranjas Lola te desea Bon apetit.