Receta del helado de sandia
Con la textura y la cremosidad perfecta para disfrutar, el helado de sandía es un verdadero helado. Ni un sorbete ni un polo. Con la nata bien fría, antes de montarla, los resultados serán espectaculares. ¿Te apuntas la receta? Ahí va
-Ingredientes
Dos hojas de menta fresca
Leche de coco (también vale de avena, arroz o almendras)
Azúcar
-Modo de elaboración
Primero que nada, hay que triturar la sandía y añadir la leche, el azúcar -o el edulcorante que elijamos- y la menta. A partir de aquí se te abren dos posibilidades, dependiendo que dispongamos o no de heladera. Si tu caso es el primero, vierte la mezcla en su vaso y ponla en funcionamiento durante 40 minutos. ¿Qué no tienes heladera? Entonces, mantén la mezcla en tu congelador durante cuatro horas… removiendo, aproximadamente, cada hora.
El siguiente paso es, seguramente, el más delicado del proceso: montar la nata. Es especialmente importante que, tanto la nata como el bol en el que vamos a montarla, estén bien fríos. ¿Miedo de que se te corte la nata? Normal, muchas veces pasa, así que, si crees que no se te va a dar bien llegar a buen puerto con el proceso, te damos un consejo. Aunque existen los estabilizantes de nata, te dejamos un consejo: consiste en echarle una cuchara de queso de untar (tipo Philadelfia) y ya no se baja y no se nota el sabor a queso.
Más información: NARANJAS LOLA