La Coca, la pizza del Levante español
Prima hermana de la pizza, la coca es, quizás, una de las comidas más universales de la gastronomía catalana… en realidad de gran parte del Levante español, que incluiría Cataluña, las Islas Baleares y el País Valenciano, además de Murcia.
Receta de origen popular, la coca (como sucede con otros muchos platos de gastronomías de países que, no siempre, fueron ricos) es una receta de pensada para para el aprovechamiento de sobras. Por ejemplo, para no tirar las masas de pan que no habían subido se les añadían condimentos, generalmente azúcar. Así surgieron recetas, saladas, dulces o mixtas, según las zonas.
Hoy, cuando quien más o quien menos, ya se puede permitir ciertos caprichos, la tradicional coca se ha ido estilizando, haciéndose más finas; siendo horneadas, casi, en el momento. También son más ligeras de lo que eran antaño, habiéndose sustituido, en muchos casos, la manteca de cerdo por el aceite de oliva.
La coca (del catalán coca, también cóc en algunas zonas del occidente catalán o fogassa en el Rosellón) es comida habitual en todos los hogares y pastelerías del Levante Español. En realidad, es una forma de preparar platos con mucha tradición en toda la orilla del Mediterráneo.
En cuanto al origen etimológico del término, el vocablo coca procede de la palabra kok del holandés de la época del Imperio Carolingio. Además, el término tiene las mismas raíces que el cake inglés o el kuchen alemán. A partir de aquí, las cocas pueden tener distintos nombres y ser de hecho iguales, o bien pueden compartir nombre, pero variar en medida, forma o ingredientes. Por poner un ejemplo, la coca de San Juan es, generalmente una coca dulce cubierta de fruta confitada, pero, en el Campo de Alicante, es salada y lleva atún. Las dos son, sin embargo, de San Juan ya que se comen, ambas, durante la Noche de San Juan.